¡Oh memoria!
Memoria con aliento de luz y sombra.
Son estos tus recuerdos agamuzados
que se acercan inertes,
que se esconden y caminan
sin pasos, sin brazos, sin alas.
Es mi vida un libro rajado, sin pasado,
sin memoria,
gastado por los años
con caminar de lado y sin sueños,
enfermo de vivir con hojas oxidadas y frías
con letras viejas.
Las palabras que me abrigaban,
perdieron su sonido, su aroma,
perdieron su vida, quedaron sin memoria.
Hoy puedo escucharlas.
Aún, están calladas, ciegas, casi muertas.
¡Oh memoria!
Como extraño tu voz,
como extraño el latir de ese corazón
que agoniza en mi cabeza,
que se aleja de mis ojos, de mi necesidad,
que partió sin mirar atrás, sin sepultar una lágrima.
En algún lugar, no sé cuándo
no sé dónde, yo me perdí.
Ya no reconozco mis recuerdos,
todo es silencio, todo es oscuro y tengo miedo.
Cómo seguir,
si ya no tengo memoria.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Solo quiero decirte, gracias.